Al igual que con la rinitis alérgica o la neurodermatitis, el sistema inmunitario en el asma alérgica reacciona de forma exagerada a los alérgenos
En los países industrializados, el asma es la enfermedad crónica más común en niños, adultos y jóvenes. Para la mayoría de los asmáticos, las alergias juegan un papel central en el desarrollo de esta enfermedad, lo que restringe la calidad de vida y el rendimiento. El número de personas afectadas por asma alérgica ha aumentado significativamente en los últimos diez años.
Al igual que con la rinitis alérgica o la neurodermatitis, el sistema inmunitario en el asma alérgica reacciona de forma exagerada a ciertos estímulos, en realidad inofensivos (alérgenos). En el asma alérgica, las reacciones ocurren en las vías respiratorias inferiores (bronquios, pulmones).
Los posibles alérgenos pueden aparecer en el entorno profesional. Lo que se denomina como asma ocupacional. La harina y los productos horneados, por ejemplo, pueden desencadenar lo que se conoce como “asma del panadero”. El polvo de la madera puede acuciar en asma a profesionales como carpinteros, ensambladores, trabajadores de aserraderos. Los plásticos a trabajadores del plástico, talleres de reparación de vehículos de motor, trabajadores de fundición.
Otros desencadenantes del asma incluyen:
Polen
Ácaros
Moho
Pelo de animales
Factores de riesgo en el asma alérgica
- Otra enfermedad basada en una tendencia a las alergias (enfermedad atópica) como la rinitis alérgica o la dermatitis
- Factores genéticos
- Nacimiento prematuro
- Obesidad
- Exposición a productos químicos
- Inicio temprano de ciertas infecciones respiratorias virales
- Tabaquismo activo y pasivo (también puede afectar negativamente el curso de la enfermedad)